LA EUTANASIA.
“La autonomía es la primera virtud de las instituciones sociales, como la verdad lo es de los sistemas de pensamiento” Jhon Rawls
“La dignidad humana… es en verdad principio
fundante del Estado,… que más que derecho en sí mismo, es el presupuesto esencial de la consagración y
efectividad del entero sistema de derechos y garantías contemplado en la
constitución”[1]
este principio busca fundamentalmente a la superación de la persona respetando
su autonomía, pero es algo que realmente no se respeta y aún menos en un país
como Colombia, donde si es complicado el hecho de no poder controlar ni aceptar
algo como el suicidio no será fácil entender el concepto de eutanasia, u
homicidio pietístico es donde podemos afirmar que el problema en sí se genera
por la equivocidad que se tiene acerca de este término, no es en sí quitar la
vida sino curar los dolores que esta produce de una manera dulce, claro está,
que ésta abre campo a un nuevo problema hablando en términos de que se está
quitando la vida de un ser humano como cualquier otro, igualándolo con un
homicidio normal.
Factores y decisiones más influyentes.
- 1. LA RELIGIÓN: Como es claro Colombia es una nación católica en su mayoría, es por esto que las decisiones se ven muchas veces encaminadas a este tema y termina siendo un factor muy importante para la decisión de si se debe o no practicar la eutanasia ya que afirman que “todo ser humano debe pasar en sus últimos momentos de permanencia en la Tierra ya que así, el dolor representa la propia cruz que carga todo ser cristiano al igual que la Pasión de Cristo, en que Jesús sufrió y cargó la cruz para el perdón de nuestros pecados” es por esto que es inaceptable tratar de escapar de la vida, además consideran que no somos nadie para elegir entre la vida y la muerte ya que solo Dios puede darla y a su vez quitarla.
- 2 LA POLÍTICA: Ya que en la corte colombiana y el estado buscan dar prioridad a la vida como se evidencia en la sentencia 234/97 “la constitución no solo busca proteger la vida sino que además incorpora como un valor del ordenamiento que implica competencias de introversión, e incluso de deberes, para el estado y para los particulares con el fin de ‘fortalecer la unidad de Nación y asegurar a sus integrantes la vida’”[2] poniendo en juego la moralidad y los principios bioéticos con el fin de hacer de la muerte la última solución a los padecimientos.
- 3. ASPECTOS PSICOLÓGICOS: La familia influye significativamente en la decisión del paciente ya que ningún ser humano está preparado para ver morir a un ser querido creando un duelo en el paciente en cuestión ya sea bueno o malo porque se enfrenta a un dolor más que físico, psicológico.
- 4. BIOÉTICA: Desde los principios bioéticos no está ni bien ni mal visto la eutanasia ya que a pesar de que se incumplan algunos de ellos con la eutanasia se le está dando cumplimiento a otros por medio de ésta, es por esto que a veces se logra llegar a un punto medio diciendo que si el paciente está en un punto crítico no está mal practicarla, mas sin embargo no se afirma que esta sea la mejor salida “la eutanasia es el camino más rápido, pero no el mejor”[3].
Aspectos en contra de los ya
mencionados:
- La religión: Si Dios es el único que puede otorgar la vida y la muerte, entonces porque no es mal visto que el ser humano busque prolongar la vida lo más largamente posible, porque según lo profesado por la religión los humanos cumplen cierto ciclo de vida (nacen, crecen, se reproducen y mueren) es entonces donde se cuestiona el por qué el hombre si tiene derecho a prolongarla pero no a acabarla, en ningún momento se ha puesto en discusión ese tema y claramente para la religión eso si no está mal siendo totalmente contradictoria la posición de la religión.
- La política: La constitución Colombiana busca en principio preservar la vida, pero sólo le pone atención cuando se habla de eutanasia u homicidio pietístico ya que cuando los pacientes requieren de medicina para subsanar sus dolores, no son atendidas sus quejas ni necesidades. Al estado poco le ha importado que durante los últimos años se hayan puesto más de 115.147 tutelas y sólo hablando del año 2013, dato que ha avanzado drásticamente a partir de ese año. Según el diario el tiempo, cada cuatro minutos se pone una tutela por negligencia médica y servicios negados en Colombia una cifra que es alarmante y que debería preocupar al estado ya que si su principal objetivo es preservar la vida, se han equivocado radicalmente en qué es priorizar ésta. Ahora bien existe otra cara de la moneda, en palabras de la corte constitucional de Colombia “El derecho de la vida no puede reducirse a la mera subsistencia, sino que implica el vivir adecuadamente en condiciones de dignidad”, es entonces donde no cobra sentido que el estado esté en contra de que una persona viva en condiciones precarias y humanamente no dignas, pero que esté a favor y que lo haga con tal de no hablar de muerte.
Conclusiones:
- La sociedad debe ser educada respecto al tema de la eutanasia ya que si se quiere tomar la opinión acerca de lo que se piensa, primero debe tenerse claro de que se trata para luego si poder tener propiedad al hablar del tema y ser consistentes a la hora de dar la respuesta.
- El estado no debe crear tanta polémica cuando un ciudadano desea morir por causas ya terminales, ya que esa es su decisión y no hay potestad alguna que tenga derecho a omitir la decisión de un paciente terminal, y por el contrario debería prestar más atención a las personas que se interesan en preservar su vida, pero que no se les da la importancia y el apoyo para continuarla.
- “Preguntémonos
si la aprobación de la eutanasia nos hace más desarrollados como sociedad, o
si, por el contrario, lo que nos hace mejores es un sentido más desarrollado de
solidaridad”.[4]
Pues bien no solo es el hecho de aprobarla sino que también es necesario crear
un ámbito en el cual la sociedad no lo vea como un problema de gran magnitud, sino como una la solución
mas viable a este problema, entendido no como el mejor remedio pero si el más
certero.
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